ERDF — INSERM — Alloc cofin — Antoine DRIEU (Q3673345): Difference between revisions
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FEDER — INSERM — Alloc COFIN — Antoine Drieu | |||||||||||||||
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Sin embargo, durante un trauma craneal sin trastornos mayores inmediatos y lesiones por imágenes cerebrales (cuando se realiza), entonces conocido como traumatismo craneal ligero (TCL), entre el 30 y el 60 % de los pacientes desarrollan trastornos de memoria y comportamiento más o menos graves, migrañas o fatiga a distancia. A menudo es difícil que las autoridades admitan que el llamado trauma leve es la causa de estos trastornos neurológicos, ya que no se objetivan mediante imágenes cerebrales positivas (escáner o resonancia magnética). Sin embargo, estos pacientes tendrán las mayores dificultades para encontrar normal, social, deporte, trabajo... Este problema diagnóstico es idéntico para otra población de pacientes neurológicos, víctimas de un accidente isquémico transitorio (ITA), definido como un trastorno neurológico transitorio de origen vascular, sin infarto de imagen objetivado (Albers et al., 2002). A corto, medio o largo plazo, también están desarrollando de manera significativa trastornos incapacitantes (Feinberg et al., 1994). Además, el 30 % de las víctimas de TIA sufrirán un accidente cerebrovascular permanente dentro de los tres meses de la AIT. Por lo tanto, es esencial que estas dos poblaciones de pacientes "hagan visible lo invisible, es decir, poner, frente a estos trastornos neurológicos, una lesión en el cerebro en su totalidad. En este contexto, investigaciones recientes realizadas dentro de la unidad INSERM U919 dirigida por el profesor Denis VIVIEN (Institut National de la Santé et de la Recherche en Santé) han demostrado en un modelo experimental que es posible objetivar una TIA a posteriori, incluso en ausencia de lesiones visibles en las imágenes cerebrales rutinarias Quenault et al., presentadas). Esta prueba visual de un AIT es posible gracias al desarrollo de herramientas optimizadas, micropartículas paramagnéticas focalizadas (MPIOs) que destacan in vivo, la existencia de una respuesta vascular a la AIT, incluso discreta. Ya hemos validado el potencial diagnóstico y predictivo a nivel cerebral o medular de este tipo de imágenes (llamadas imágenes moleculares de alta resolución) en diversas publicaciones (Montagne et al., Neuroimage, 2012; Gauberti y otros, Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, en prensa). (Spanish) | |||||||||||||||
Property / summary: Sin embargo, durante un trauma craneal sin trastornos mayores inmediatos y lesiones por imágenes cerebrales (cuando se realiza), entonces conocido como traumatismo craneal ligero (TCL), entre el 30 y el 60 % de los pacientes desarrollan trastornos de memoria y comportamiento más o menos graves, migrañas o fatiga a distancia. A menudo es difícil que las autoridades admitan que el llamado trauma leve es la causa de estos trastornos neurológicos, ya que no se objetivan mediante imágenes cerebrales positivas (escáner o resonancia magnética). Sin embargo, estos pacientes tendrán las mayores dificultades para encontrar normal, social, deporte, trabajo... Este problema diagnóstico es idéntico para otra población de pacientes neurológicos, víctimas de un accidente isquémico transitorio (ITA), definido como un trastorno neurológico transitorio de origen vascular, sin infarto de imagen objetivado (Albers et al., 2002). A corto, medio o largo plazo, también están desarrollando de manera significativa trastornos incapacitantes (Feinberg et al., 1994). Además, el 30 % de las víctimas de TIA sufrirán un accidente cerebrovascular permanente dentro de los tres meses de la AIT. Por lo tanto, es esencial que estas dos poblaciones de pacientes "hagan visible lo invisible, es decir, poner, frente a estos trastornos neurológicos, una lesión en el cerebro en su totalidad. En este contexto, investigaciones recientes realizadas dentro de la unidad INSERM U919 dirigida por el profesor Denis VIVIEN (Institut National de la Santé et de la Recherche en Santé) han demostrado en un modelo experimental que es posible objetivar una TIA a posteriori, incluso en ausencia de lesiones visibles en las imágenes cerebrales rutinarias Quenault et al., presentadas). Esta prueba visual de un AIT es posible gracias al desarrollo de herramientas optimizadas, micropartículas paramagnéticas focalizadas (MPIOs) que destacan in vivo, la existencia de una respuesta vascular a la AIT, incluso discreta. Ya hemos validado el potencial diagnóstico y predictivo a nivel cerebral o medular de este tipo de imágenes (llamadas imágenes moleculares de alta resolución) en diversas publicaciones (Montagne et al., Neuroimage, 2012; Gauberti y otros, Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, en prensa). (Spanish) / rank | |||||||||||||||
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Property / summary: Sin embargo, durante un trauma craneal sin trastornos mayores inmediatos y lesiones por imágenes cerebrales (cuando se realiza), entonces conocido como traumatismo craneal ligero (TCL), entre el 30 y el 60 % de los pacientes desarrollan trastornos de memoria y comportamiento más o menos graves, migrañas o fatiga a distancia. A menudo es difícil que las autoridades admitan que el llamado trauma leve es la causa de estos trastornos neurológicos, ya que no se objetivan mediante imágenes cerebrales positivas (escáner o resonancia magnética). Sin embargo, estos pacientes tendrán las mayores dificultades para encontrar normal, social, deporte, trabajo... Este problema diagnóstico es idéntico para otra población de pacientes neurológicos, víctimas de un accidente isquémico transitorio (ITA), definido como un trastorno neurológico transitorio de origen vascular, sin infarto de imagen objetivado (Albers et al., 2002). A corto, medio o largo plazo, también están desarrollando de manera significativa trastornos incapacitantes (Feinberg et al., 1994). Además, el 30 % de las víctimas de TIA sufrirán un accidente cerebrovascular permanente dentro de los tres meses de la AIT. Por lo tanto, es esencial que estas dos poblaciones de pacientes "hagan visible lo invisible, es decir, poner, frente a estos trastornos neurológicos, una lesión en el cerebro en su totalidad. En este contexto, investigaciones recientes realizadas dentro de la unidad INSERM U919 dirigida por el profesor Denis VIVIEN (Institut National de la Santé et de la Recherche en Santé) han demostrado en un modelo experimental que es posible objetivar una TIA a posteriori, incluso en ausencia de lesiones visibles en las imágenes cerebrales rutinarias Quenault et al., presentadas). Esta prueba visual de un AIT es posible gracias al desarrollo de herramientas optimizadas, micropartículas paramagnéticas focalizadas (MPIOs) que destacan in vivo, la existencia de una respuesta vascular a la AIT, incluso discreta. Ya hemos validado el potencial diagnóstico y predictivo a nivel cerebral o medular de este tipo de imágenes (llamadas imágenes moleculares de alta resolución) en diversas publicaciones (Montagne et al., Neuroimage, 2012; Gauberti y otros, Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, en prensa). (Spanish) / qualifier | |||||||||||||||
point in time: 14 January 2022
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Revision as of 23:45, 13 January 2022
Project Q3673345 in France
Language | Label | Description | Also known as |
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English | ERDF — INSERM — Alloc cofin — Antoine DRIEU |
Project Q3673345 in France |
Statements
44,149.00 Euro
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89,149.0 Euro
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49.52 percent
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1 October 2015
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31 March 2019
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EPA INSERM INSTITUT NAT DE LA SANTE ET DE LA RECHERCHE MEDICALE
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75654
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Lors d un traumatisme cranien pourtant sans troubles majeurs immédiats et lésions en imagerie cérébrale (lorsque elle est réalisée), appelés alors traumatismes crâniens légers (TCL), 30 à 60 pourcent des patients développent à distance des troubles plus ou moins sévères de mémoire et de comportement, des migraines ou une fatigue. Il est le plus souvent difficile de faire admettre aux autorités que le trauma dit léger est la cause de ces troubles neurologiques, puisque non objectivés par une imagerie cérébrale positive (scanner ou IRM). Il n en reste pas moins que ces patients vont avoir les plus grandes difficultés à retrouver des activités normales, sociales, sportives, un travail ... Cette problématique diagnostique est identique pour une autre population de patients neurologiques, victimes d un Accident Ischémique Transitoire (AIT), défini comme étant un trouble neurologique transitoire d origine vasculaire, sans infarctus objectivé en imagerie (Albers et al., 2002). Eux aussi vont dans une proportion significative développer à court, moyen ou long terme des troubles invalidants (Feinberg et al., 1994). De plus, 30 pourcent de victimes d un AIT vont souffrir un accident vasculaire cérébral permanent dans le trois mois qui suivent l AIT.Ainsi, il devient primordial pour ces deux populations de patients de « rendre visible l invisible , c est à dire de mettre, en face de ces troubles neurologiques, une atteinte du cerveau dans son intégralité. Dans ce cadre, les récents travaux de recherche menés au sein de l unité INSERM U919 dirigée par le Pr Denis VIVIEN (Institut National de la Santé Et de la Recherche en Santé) ont montré dans un modèle expérimental, qu il était possible d objectiver a posteriori un AIT, même en absence de lésion visible en imagerie cérébrale de routine Quenault et al., soumis). Cette preuve visuelle d un AIT est possible grâce au développement d outils optimisés, des microparticules paramagnétiques ciblées (MPIOs) qui mettent en évidence in vivo, l existence d une réponse vasculaire à l AIT, même discrète. Nous avons déjà validé le potentiel diagnostique et prédictif au niveau cérébral ou médullaire de ce type d imagerie (dite imagerie moléculaire haute résolution) dans diverses publications (Montagne et al., Neuroimage, 2012 ; Gauberti et al., Stroke, 2013 ; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, in press). (French)
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However, during a Cranial trauma without immediate major disorders and brain imaging lesions (when it is performed), then known as light head trauma (TCL), 30 to 60 percent of patients develop more or less severe memory and behavioural disorders, migraines or fatigue at a distance. It is most often difficult to get the authorities to admit that so-called mild trauma is the cause of these neurological disorders, since not objectivated by positive brain imaging (scanner or MRI). Nevertheless, these patients will have the greatest difficulties in finding normal, social, sports, work... This diagnostic problem is identical for another population of neurological patients, victims of a Transitory Ischemic Accident (ITA), defined as a transient neurological disorder of vascular origin, without objectivated imaging infarction (Albers et al., 2002). In the short, medium or long term, they are also significantly developing disabling disorders (Feinberg et al., 1994). In addition, 30 per cent of TIA victims will suffer a permanent stroke within three months of the AIT.Thus, it becomes essential for these two patient populations to "make visible the invisible, i.e. to put, in front of these neurological disorders, an injury to the brain in its entirety. In this context, recent research carried out within the INSERM U919 unit led by Professor Denis VIVIEN (Institut National de la Santé et de la Recherche en Santé) has shown in an experimental model that it is possible to objective a TIA a posteriori, even in the absence of visible lesion in routine brain imaging Quenault et al., submitted). This visual proof of an AIT is possible thanks to the development of optimised tools, targeted paramagnetic microparticles (MPIOs) that highlight in vivo, the existence of a vascular response to AIT, even discreet. We have already validated the diagnostic and predictive potential at the cerebral or medullary level of this type of imaging (so called high-resolution molecular imaging) in various publications (Montagne et al., Neuroimage, 2012; Gauberti et al., Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, in press). (English)
18 November 2021
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Bei einem kranischen Trauma ohne unmittelbare schwere Störungen und Verletzungen in der Hirnbildgebung (wenn es durchgeführt wird), die dann als leichtes Schädeltrauma bezeichnet werden, entwickeln 30 bis 60 Prozent der Patienten aus der Ferne mehr oder weniger schwere Gedächtnis- und Verhaltensstörungen, Migräne oder Müdigkeit. Am häufigsten ist es schwierig, den Behörden zuzustimmen, dass das so genannte leichte Trauma die Ursache dieser neurologischen Störungen ist, da sie nicht durch eine positive Hirnbildgebung (Scanner oder MRT) objektivisiert werden. Es bleibt jedoch, dass diese Patienten die größten Schwierigkeiten haben werden, wieder normale, soziale, sportliche Aktivitäten, Arbeit... Diese diagnostische Problematik ist für eine andere Population neurologischer Patienten identisch, die Opfer eines Übergangs-Ischem-Unfall (ITA) sind, definiert als eine vorübergehende neurologische Störung mit vaskulärem Ursprung, ohne objectivierter Infarkt in der Bildgebung (Albers et al., 2002). Auch sie entwickeln kurz-, mittel- oder langfristig signifikante Störungen (Feinberg et al., 1994). Darüber hinaus werden 30 Prozent der Opfer eines AIT innerhalb von drei Monaten nach dem AIT einen permanenten Schlaganfall erleiden.So wird es für diese beiden Patientenpopulationen von entscheidender Bedeutung, "das Unsichtbare sichtbar zu machen, d. h. vor diesen neurologischen Störungen eine Schädigung des Gehirns in seiner Gesamtheit zu setzen. In diesem Zusammenhang haben die jüngsten Forschungsarbeiten im Referat INSERM U919 unter der Leitung von Prof. Denis VIVIEN (Nationales Institut für Gesundheit und Gesundheitsforschung) in einem experimentellen Modell gezeigt, dass es möglich ist, ein AIT nachträglich zu objektivieren, auch wenn es keine sichtbare Verletzung in der routinemäßigen Hirnbildgebung Quenault et al. gibt. Dieser visuelle Beweis eines AIT ist möglich durch die Entwicklung optimierter Werkzeuge, gezielte paramagnetische Mikropartikel (MPIOs), die in vivo die Existenz einer vaskulären Reaktion auf den ITA, auch diskret, erkennen lassen. Wir haben das diagnostische und prädiktive Potenzial dieser Art von Bildgebung (sogenannte hochauflösende molekulare Bildgebung) bereits in verschiedenen Publikationen validiert (Montagne et al., Neuroimage, 2012; Gauberti et al., Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, in press). (German)
1 December 2021
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Echter, tijdens een schedeltrauma zonder onmiddellijke grote stoornissen en hersenvormingslaesies (wanneer het wordt uitgevoerd), dan bekend als light head trauma (TCL), ontwikkelt 30 tot 60 procent van de patiënten min of meer ernstige geheugen- en gedragsstoornissen, migraine of vermoeidheid op afstand. Het is meestal moeilijk om de autoriteiten te laten toegeven dat zogenaamde milde trauma’s de oorzaak zijn van deze neurologische aandoeningen, omdat ze niet worden geobjectiveerd door positieve hersenbeeldvorming (scanner of MRI). Toch zullen deze patiënten de grootste problemen hebben bij het vinden van normale, sociale, sport, werk... Dit diagnostische probleem is identiek voor een andere populatie van neurologische patiënten, slachtoffers van een transitory Ischemic Accident (ITA), gedefinieerd als een voorbijgaande neurologische aandoening van vasculaire oorsprong, zonder objectivated imaging infarct (Albers et al., 2002). Op korte, middellange of lange termijn ontwikkelen zij ook een aanzienlijke ontwikkeling van arbeidsongeschiktheidsstoornissen (Feinberg et al., 1994). Bovendien zal 30 procent van de TIA-slachtoffers binnen drie maanden na de AIT een permanente beroerte ondergaan. Zo wordt het essentieel voor deze twee patiëntenpopulaties om "het onzichtbare zichtbaar te maken, d.w.z. om, voor deze neurologische aandoeningen, een letsel aan de hersenen in zijn geheel te plaatsen. In dit verband heeft recent onderzoek binnen de INSERM U919-eenheid onder leiding van professor Denis VIVIEN (Institut National de la Santé et de la Recherche en Santé) in een experimenteel model aangetoond dat het mogelijk is om a posteriori een TIA na te streven, zelfs bij afwezigheid van zichtbare laesie in routinematige hersenbeeldvorming Quenault et al., overgelegd). Dit visuele bewijs van een AIT is mogelijk dankzij de ontwikkeling van geoptimaliseerde gereedschappen, gerichte paramagnetische microdeeltjes (MPIO’s) die in vivo het bestaan van een vasculaire reactie op AIT benadrukken, zelfs discreet. In diverse publicaties (Montagne et al., Neuroimage, 2012) hebben we het diagnostische en voorspellende potentieel op cerebrale of medullair niveau van dit type beeldvorming (de zogenaamde moleculaire beeldvorming met hoge resolutie) reeds gevalideerd; Gauberti et al., Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, in de pers). (Dutch)
6 December 2021
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Tuttavia, durante un trauma cranico senza disturbi gravi immediati e lesioni per immagini cerebrali (quando viene eseguito), allora noto come trauma cranico (TCL), 30-60 % dei pazienti sviluppano più o meno gravi disturbi della memoria e del comportamento, emicranie o affaticamento a distanza. È molto spesso difficile convincere le autorità ad ammettere che i cosiddetti traumi lievi sono la causa di questi disturbi neurologici, dal momento che non sono oggettivati da immagini cerebrali positive (scanner o risonanza magnetica). Tuttavia, questi pazienti avranno le maggiori difficoltà a trovare normale, sociale, sport, lavoro... Questo problema diagnostico è identico per un'altra popolazione di pazienti neurologici, vittime di un incidente ischemico transitorio (ITA), definito come un disturbo neurologico transitorio di origine vascolare, senza infarto per immagini oggettivato (Albers et al., 2002). A breve, medio o lungo termine, si stanno anche sviluppando significativamente disturbi invalidanti (Feinberg et al., 1994). Inoltre, il 30 % delle vittime di TIA subirà un ictus permanente entro tre mesi dall'AIT. Pertanto, diventa essenziale per queste due popolazioni di pazienti "rendere visibile l'invisibile, cioè mettere, di fronte a questi disturbi neurologici, una lesione al cervello nella sua interezza. In questo contesto, recenti ricerche condotte all'interno dell'unità INSERM U919 guidata dal professor Denis VIVIEN (Institut National de la Santé et de la Recherche en Santé) hanno dimostrato in un modello sperimentale che è possibile stabilire una TIA a posteriori, anche in assenza di lesioni visibili nell'imaging cerebrale di routine Quenault et al., presentato). Questa prova visiva di un AIT è possibile grazie allo sviluppo di strumenti ottimizzati, microparticelle paramagnetiche mirate (MPIO) che evidenziano in vivo, l'esistenza di una risposta vascolare all'AIT, anche discreta. Abbiamo già convalidato il potenziale diagnostico e predittivo a livello cerebrale o medullario di questo tipo di imaging (la cosiddetta imaging molecolare ad alta risoluzione) in varie pubblicazioni (Montagne et al., Neuroimage, 2012; Gauberti et al., Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, in stampa). (Italian)
13 January 2022
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Sin embargo, durante un trauma craneal sin trastornos mayores inmediatos y lesiones por imágenes cerebrales (cuando se realiza), entonces conocido como traumatismo craneal ligero (TCL), entre el 30 y el 60 % de los pacientes desarrollan trastornos de memoria y comportamiento más o menos graves, migrañas o fatiga a distancia. A menudo es difícil que las autoridades admitan que el llamado trauma leve es la causa de estos trastornos neurológicos, ya que no se objetivan mediante imágenes cerebrales positivas (escáner o resonancia magnética). Sin embargo, estos pacientes tendrán las mayores dificultades para encontrar normal, social, deporte, trabajo... Este problema diagnóstico es idéntico para otra población de pacientes neurológicos, víctimas de un accidente isquémico transitorio (ITA), definido como un trastorno neurológico transitorio de origen vascular, sin infarto de imagen objetivado (Albers et al., 2002). A corto, medio o largo plazo, también están desarrollando de manera significativa trastornos incapacitantes (Feinberg et al., 1994). Además, el 30 % de las víctimas de TIA sufrirán un accidente cerebrovascular permanente dentro de los tres meses de la AIT. Por lo tanto, es esencial que estas dos poblaciones de pacientes "hagan visible lo invisible, es decir, poner, frente a estos trastornos neurológicos, una lesión en el cerebro en su totalidad. En este contexto, investigaciones recientes realizadas dentro de la unidad INSERM U919 dirigida por el profesor Denis VIVIEN (Institut National de la Santé et de la Recherche en Santé) han demostrado en un modelo experimental que es posible objetivar una TIA a posteriori, incluso en ausencia de lesiones visibles en las imágenes cerebrales rutinarias Quenault et al., presentadas). Esta prueba visual de un AIT es posible gracias al desarrollo de herramientas optimizadas, micropartículas paramagnéticas focalizadas (MPIOs) que destacan in vivo, la existencia de una respuesta vascular a la AIT, incluso discreta. Ya hemos validado el potencial diagnóstico y predictivo a nivel cerebral o medular de este tipo de imágenes (llamadas imágenes moleculares de alta resolución) en diversas publicaciones (Montagne et al., Neuroimage, 2012; Gauberti y otros, Stroke, 2013; Gauberti et al., Front Cell Neurosci, en prensa). (Spanish)
14 January 2022
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Identifiers
15P03530
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